¿QUÉ ES MINDFULNESS?

Mindfulness es una palabra inglesa que no tiene equivalente directo en castellano; se suele traducir como “ATENCIÓN PLENA” o “CONCIENCIA PLENA”. Nosotros nos referiremos a ella a veces con su expresión traducida y otras con su forma original anglosajona.

En estas líneas que siguen pretendemos que consigas hacerte una idea suficientemente clara de lo que esto significa, de manera que puedas comprender en qué consiste y de qué modo puede ayudarte a mejorar tu vida y tu relación con la comida.

En realidad, es casi imposible dar una definición que delimite completamente lo que es mindfulness. Actualmente son muchos los autores que escriben y hablan sobre este asunto, dando múltiples definiciones. En nuestra opinión ninguna de ellas la caracteriza completamente, pero podemos hacer un repaso de algunas de ellas para hacernos una idea inicial  de alguno de sus aspectos:

  •   Mindfulness es mantener viva la CONSCIENCIA en la REALIDAD PRESENTE” (Hanh, 1976)
  • “La CAPACIDAD HUMANA UNIVERSAL Y BÁSICA, que consiste en ser conscientes de los contenidos de la mente, momento a momento” (Simón, 2007)
  • “Prestar atención de manera particular, en el momento presente y SIN JUICIOS MENTALES” (Zinn, 1994)
  • “Darse cuenta del momento presente y vivirlo con ACEPTACIÓN” (Germer, 2005)

MINDFULNESS EN EL MÉTODO THINKING

La razón principal por la que estamos incluyendo mindfulness como un elemento de nuestro programa, es a que es el elemento central en el que convergen muchas de esas herramientas que te van a ayudar a completar con éxito tu objetivo.

Si mantenemos esta actitud de atención plena durante todo el día, iremos tomando conciencia de las cosas que van pasando en nuestro interior y en nuestro entorno, y de cómo nos afecta lo que sucede en uno y otro lugar. Esto es fundamental para descubrir los patrones que tenemos adquiridos, las asociaciones que se disparan de forma automática, la forma en que solemos manejar el estrés emocional y el cansancio. Como ya sabes, todo esto influye enormemente en la forma en que comemos, y a medida que lo vayamos haciendo consciente, podremos liberarnos poco a poco de esa influencia.

Hay otra razón por la que estamos dedicando un espacio semanal para practicar mindfulness: sabemos que no es fácil mantener este grado de vigilancia, que no siempre es sencillo darnos cuenta de lo que está pasando y, más aún, que no siempre es fácil manejar los pensamientos y emociones con los que nos encontramos cuando tomamos conciencia de ellos. En esto también nos va a ayudar mindfulness dándonos una herramienta de vital importancia: la capacidad de sostener estas cosas con las que vayamos entrando en contacto. Mindfulness nos va proporcionar un espacio interior para ver lo que sucede, un espacio en el que podamos tomar conciencia, y nos va a dar la fuerza necesaria para poder sostenerlo, para distanciarme lo suficiente de manera que pueda verlo sin que me afecte tanto, con un poco más de distancia y perspectiva.

LOS BENEFICIOS DE MINDFULNESS

Hay una cantidad enorme de estudios recientes sobre los beneficios que la práctica de mindfulness tiene sobre todo tipo de aspectos en la vida y en concreto en diferentes programas de reducción de peso.

Nuestro objetivo aquí no es repasar esta larga lista, sino animarte a que experimentes tú mismo estos beneficios en tu propia vida y que esto te ayude a conseguir tu objetivo.

A medida que vayas acostumbrándote a esto, según vayas incorporando el hábito de la atención plena a tu vida, vas a ir dándote cuenta de cosas de las que antes no te percatabas, vas a poder experimentar las situaciones conflictivas y las situaciones desagradables de otra forma y vas a poder comprender mucho mejor de donde surgen todas estas cosas que antes te sorprendían cuando era demasiado tarde para poder detener las consecuencias.

Muchas veces somos nosotros mismos, con nuestras acciones, las que perpetuamos las situaciones problemáticas. Repetimos una y otra vez lo mismo, de manera inconsciente, sin darnos cuenta de que, no solo no se resuelve el problema, sino que a veces incluso lo mantiene.

Al prestar atención desde este nuevo punto de vista, vas a descubrir estos patrones y vas a poder liberarte de ellos, abriendo la puerta a nuevas formas de ser y estar.

Esperamos que ya tengas clara la gran relación que esto tiene con la comida. La conciencia es el pilar del método thinking y es la puerta que te a va permitir convertir tu objetivo en realidad de una manera verdadera y duradera. Vas a poder ver lo que pasa y vas a poder sostenerlo, vas a poder tomar otras decisiones y otros caminos. Lo que hoy te parece difícil, te va a ir resultando mucho más sencillo, gracias a la claridad y a la fortaleza que la práctica de mindfulness te va a proporcionar.

Podríamos seguir escribiendo más, pero creemos que ya hemos transmitido las ideas fundamentales. Llega el momento de practicar, de hacer todo esto realidad.

LAS DOS CARAS DE MINDFULNESS

Esperamos que todo lo que hemos ido escribiendo más arriba haya ido aclarando poco a poco a qué nos referimos cuando hablamos de mindfulness y cómo puede ayudarte a mejorar tu relación con la comida, pero vamos a tratar de profundizar un poco más, haciendo especial énfasis en un elemento fundamental que normalmente no se destaca lo suficiente: ¿CÓMO SE PRACTICA MINDFULNESS? Mindfulness tiene dos caras; veamos cuáles son y el aspecto que tiene cada una de ellas.

Mindfulness como ACTITUD

La clave es la LIBERTAD. Esta libertad se va a manifestar de muchas maneras. Un ejemplo muy claro, para que te hagas una idea, tiene que ver con las asociaciones automáticas que muchas veces nos llevan a hacer cosas que no queremos hacer, pero que cuando nos damos cuenta ya estamos haciendo. Cuando tengas una mayor capacidad de permanecer atento a cada momento presente te darás cuenta de cómo se activan esas asociaciones y por tanto tendrás una oportunidad de cambiar el resultado. Estarás liberado de tus reacciones automáticas, de tus hábitos perjudiciales. Verás que entre el evento y tu reacción hay un espacio en el que tú puedes decidir hacer otra cosa, algo nuevo, algo diferente.

Mindfulness es una actitud, una forma de estar en relación con nosotros mismos y con el mundo que nos rodea. Esto por supuesto incluye también a tu relación con la comida. Mindfulness es ATENCIÓN PLENA, la actitud de estar consciente, vigilante, dándote cuenta de lo que está pasando en el presente. Cuando estamos en esta actitud estaremos teniendo en cuenta las características que hemos ido destacando en los párrafos anteriores. Estas características se pueden resumir en una única frase: una aproximación a la realidad basada en la curiosidad y la aceptación, sin juicios previos, sin prejuicios, que nos permita ver claramente lo que está pasando, que nos permita tomar conciencia de lo que sucede y ser libres para tomar la mejor decisión sobre cómo actuar en esas circunstancias.

Mindfulness como CUALIDAD-CAPACIDAD

El otro aspecto de mindfulness tiene que ver con la capacidad de llevar a la práctica esas cosas que hemos escrito en el párrafo anterior y que suenan tan bonitas. En una de las frases que destacábamos anteriormente, se nos recordaba que todos tenemos esta capacidad. La dificultad viene del hecho de que es una capacidad que, aunque sea innata y universal, no la hemos cultivado mucho, no la hemos ejercitado. Cuando nos ponemos por primera vez a tratar de poner en práctica las maravillosas virtudes de la atención plena, nos damos cuenta de que es casi imposible no caer en la trampa de los tres principales obstáculos:

  • El hábito de irnos hacia el pasado o el futuro
  • La tendencia a llenar el presente con nuestros juicios, pensamientos, temores,…
  • La fuerza de ciertas emociones y sentimientos que nos fuerzan a hacer cosas que nosotros no queremos hacer.

Cómo nos damos cuenta de esta dificultad, tenemos la necesidad de ejercitar esta cualidad.

Queremos destacar esto porque normalmente se descuida, dándose por hecho que la práctica de la atención es algo fácil y automático. Lo cierto es que no es tan sencillo, y vamos a tener que ejercitarnos en ello. Esta va a ser la principal finalidad de nuestras sesiones grupales de mindfulness. ¿Cómo vamos a hacerlo? Por suerte, esto es algo muy sencillo. Lo vamos a hacer a través de ciertos ejercicios concretos, muy sencillos, basados en otra capacidad que también tenemos todas las personas: la CONCENTRACIÓN. Con estos ejercicios de concentración vamos a desarrollar nuestra capacidad de mindfulness como si estuviéramos en un gimnasio tratando de fortalecer nuestros músculos.

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